El crecimiento de las empresas de vigilancia a lo largo del tiempo ha sido significativo, especialmente en las últimas décadas con el avance de la tecnología y la creciente preocupación por la seguridad.

En las décadas de 1960 y 1970, la vigilancia estaba principalmente en manos del gobierno y de las fuerzas del orden público. Sin embargo, con la creciente demanda de seguridad por parte de las empresas y los individuos, comenzaron a surgir empresas privadas de seguridad y vigilancia.

En la década de 1980, las empresas de vigilancia experimentaron un crecimiento significativo debido a la creciente preocupación por el terrorismo y la delincuencia. Con la llegada de las cámaras de seguridad y la tecnología de vigilancia, las empresas de seguridad se convirtieron en proveedores de servicios más sofisticados y especializados.

En las décadas de 1990 y 2000, el mercado de la seguridad privada creció aún más, impulsado por el aumento de la delincuencia en algunos países y la demanda de servicios de seguridad en el sector empresarial. Las empresas de seguridad se diversificaron, ofreciendo servicios como vigilancia, consultoría en seguridad, ciberseguridad y análisis de riesgos.

En los últimos años, el crecimiento de las empresas de vigilancia se ha acelerado aún más debido a la creciente demanda de servicios de seguridad en línea y la expansión de la tecnología de vigilancia, como la inteligencia artificial y el reconocimiento facial. Además, la pandemia de COVID-19 ha aumentado la demanda de servicios de seguridad y vigilancia, ya que muchas empresas y organizaciones buscan protegerse contra la delincuencia y el vandalismo.

En resumen, el crecimiento de las empresas de vigilancia ha sido constante y significativo a lo largo del tiempo, impulsado por la creciente demanda de seguridad y la evolución de la tecnología de vigilancia